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¿Mucha grasa en el abdomen? Puedes tener Síndrome Metabólico

Muchas veces nos preocupa la grasa en el abdomen por motivos estéticos. Por vergüenza de tener ‘panza’.

Sin embargo, es un asunto mucho más serio de lo que te imaginas.

La grasa que se acumula en el abdomen produce sustancias en el organismo y genera reacciones que nos pueden enfermar.

De hecho, se calcula que una de cada cuatro personas en el mundo tiene problemas de salud relacionados con estas acumulaciones de grasa.

El conjunto de estas alteraciones se llama Síndrome Metabólico y, aunque no es algo fácil de lograr, necesitamos controlarlo lo más que podamos.

¿Por qué la grasa del abdomen se vuelve un problema?

Muchas de las comidas que ingerimos tienen grasas que se absorben a la sangre y se acumulan en el cuerpo de maneras diferentes.

Una manera es la llamada grasa subcutánea, que significa que está debajo de la piel. Esta grasa no tiene mayor problema ni genera enfermedades.

La otra manera en que se acumulan estas grasas es dentro de la llamada grasa visceral. Esa es la problemática porque altera todo el funcionamiento del cuerpo.

La grasa visceral se acumula en varias partes, pero la más evidente es en la zona abdominal.

Produce la llamada obesidad ‘androide’, ‘central’ o ‘en forma de manzana’ para diferenciarla de la grasa subcutánea que, por ir a las caderas principalmente, se ha  llamado ‘en forma de pera’.

Por múltiples y complicadas razones, cuando el cuerpo humano acumula grasa visceral en exceso, presenta problemas para que la insulina natural del cuerpo actúe y se produce la llamada resistencia a la insulina y, finalmente, el Síndrome Metabólico.

La resistencia a la insulina aumenta el azúcar en la sangre, hace que los triglicéridos se acumulen y acaben disminuyendo el ‘colesterol bueno’ y aumenta la presión arterial porque altera el riñón, entre otras cosas.

En resumen, esta resistencia no es nada buena. Te invito a leer el post Siete consejos para activar tu insulina natural para aprender más al respecto.

¿Qué es el Síndrome Metabólico?

Desde épocas muy antiguas, los libros y tratados de medicina han asociado la obesidad con ciertas enfermedades. La diabetes y los infartos cardiacos son los primeros en esta lista.

También los médicos notaron desde hace mucho que las personas con obesidad, especialmente con aumento de grasa abdominal, presentaban más posibilidad de tener elevaciones de la presión arterial o hipertensión arterial.

En nuestros tiempos modernos, se vio que, además de todas estas alteraciones, también se evidenciaban anormalidades en los análisis de sangre.

Las grasas en la sangre se alteran y lo puedes ver en el perfil lipídico: Colesterol total, colesterol LDL, colesterol HDL y Triglicéridos.

Poco a poco se trató de reunir todas estas anormalidades en un solo grupo para decidir cómo evitar complicaciones (diabetes, infartos cardiacos, trombosis cerebrales) y, por fin, a fines del siglo XX se estableció cómo hacer el diagnóstico del Síndrome Metabólico.

¿Cómo saber si tengo síndrome Metabólico?

El Síndrome Metabólico tiene cinco componentes. Si presentas tres o más al tiempo en cualquier momento de la vida, lo tienes. Estos son:

  • Aumento del perímetro de la cintura: El médico o la enfermera miden la circunferencia del abdomen y da una cifra. Se ha establecido que es diferente para diferentes zonas geográficas y también cambia en hombres y en mujeres.

La definición de perímetro abdominal aumentado para los adultos nacidos en Centroamérica y Suramérica es máximo de 94 cm para varones y de 80 cm para mujeres.

  • Aumento de los Triglicéridos en la sangre: más de 150 mg%
  • Disminución del colesterol HDL en la sangre o “colesterol bueno” porque no se acumula en las arterias: Menos de 40 mg%
  • Aumento de la presión arterial: 

Presión sistólica mayor de 130 mm Hg

Presión diastólica mayor de 85 mm Hg

  • Aumento de la glucosa en ayunas (azúcar en la sangre): Más de 100 mg%

Si solo aparecen algunos de estos indicadores también debes tener tratamiento porque cada uno representa un riesgo para la salud.

Además, hay condiciones en las que se piensa que es más posible desarrollar Síndrome Metabólico porque se presentan muchas veces juntos. Así que cuídate si tienes:

  • Hígado graso no alcohólico: aparece en una ecografía o ultrasonido de abdomen.
  • Elevación del ácido úrico en sangre o gota.
  • Síndrome de ovario poliquístico: se presenta por lo general con alteraciones en la menstruación y obesidad.
  • Apnea obstructiva del sueño: Ronquidos nocturnos y periodos de falta de respiración al dormir.

Y entonces, ¿qué puedo hacer ante el Síndrome Metabólico?

Debes implementar cambios en tu manera de pensar, actuar, comer y ver la vida para que tú y tus hijos enfrenten esta epidemia.

Cada vez hay más niños y adolescentes que presentan alteraciones del azúcar y los triglicéridos relacionadas con esta enfermedad que se supone que se debería presentar solo en adultos.

Así que hay que disminuir la grasa visceral con estos cambios:

  1. La dieta es básica, todos lo sabemos. 

Se debe hacer una dieta abundante en frutas, verduras, cereales integrales, carnes magras, en especial aves y pescado.

La manera de comer sano debe ser una convicción, no una dieta pasajera o una moda mientras bajamos de peso para las vacaciones.

Esta es la única manera de disminuir la grasa visceral.

  1. El ejercicio, por supuesto es fundamental.

El sedentarismo es un mal mundial. Se ha visto que usar la computadora más de cuatro horas al día aumenta el riesgo de Síndrome Metabólico.

Si hay obesidad o sobrepeso se debería perder por lo menos del 5 a 10% de peso a un ritmo lento de más o menos una libra por semana, pero sosteniéndolo por un largo tiempo.

El ejercicio se debe hacer aumentándolo poco a poco hasta llegar a 60 a 90 minutos diarios para realmente bajar de peso.

Sin embargo, treinta minutos al día de una actividad moderada también sirven: por ejemplo, caminar, hacer las labores de la casa, jugar con los niños o las mascotas, hacer trabajos de jardinería. 

  1. No desanimarse

Después de perdido el peso vuelve a recuperarse casi tan rápido como se perdió, así que es necesario no perder el ánimo:

  • Rodearse de personas que deseen un cambio para mejorar: hacer buen uso de redes sociales para aprender cada vez mejores hábitos de salud.
  • Adquirir conocimiento en internet como estás haciendo ahora.
  • Tener controles periódicos con el médico para chequear la presión arterial, el peso y el perímetro abdominal.
  • Toma de exámenes de laboratorio para verificar la mejoría.
  • Idealmente, tener controles con un especialista en nutrición.

El Síndrome Metabólico no es una sentencia de muerte si le prestamos atención y, si sigues estas recomendaciones te verás y, sobre todo, te sentirás muy bien.

Referencias

as.com Actividades cotidianas para bajar de peso

Mayo Clinic Colesterol HDL: Cómo aumentar tu colesterol ‘bueno’

Mayo Clinic Grasa abdominal en las mujeres

MedlinePlus Colesterol bueno (HDL).

MedlinePlus Síndrome metabólico

NIH SÍNDROME METABÓLICO Causas y factores de riesgo

PDF Breve crónica de la definición del Síndrome Metabólico

PDF SÍNDROME METABÓLICO: Una epidemia en la actualidad

Tuasaude Grasa visceral

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